Reportería rural: Marinilla, pueblo de fe y devoción a los Cristos

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En este pequeño pueblo del occidente antioqueño habita la colección de cristos más grande del mundo.

Roberto Hoyos Castaño, hombre de admirable fe y quien heredó de sus padres la pasión a la Iglesia Católica, entregó al municipio una colección de 2700 cristos que coleccionó, clasificó y conservó durante 30 años.

Algunas de las piezas del museo las obtuvo en sus viajes y otros fueron obsequios de sus familiares y amigos.  Muchos de estos crucifijos son procedentes de diferentes países como Inglaterra, España, Francia, Rusia, Italia estados unidos, Alemania, Argentina, Chile, Uruguay, Egipto, Israel, México, Suiza, Ecuador, Perú, Venezuela, Cuba, Kenia, Slovenia, entre otros.
 

  Marinilla

Es un municipio de Colombia, situado en la subregión oriental del departamento de Antioquia. Su cabecera municipal está a 47 kilómetros de Medellín.

Marinilla es un centro cultural del oriente Antioqueño, poseedor de un altísimo valor histórico. A pesar de que originalmente la zona donde hoy se asienta era minera, en la que se introdujeron esclavos negros y que había sido habitada por indígenas, Marinilla es un pueblo donde no hubo tanto mestizaje como en otros municipios de Antioquia de modo que la gente suele ser más zarca, e incluso se ven muchas personas de piel blanca, pelo rubio y ojos claros.

Marinilla es también un pueblo altamente religioso y conservador en sus tradiciones, donde los diferentes artes y oficios se mantienen por generaciones. Por supuesto entonces, en Marinilla no es raro encontrar a alguien que todavía cocine lo que comían los arrieros, o alguien que cuente historias de antepasados o construya guitarras como lo hacían en el pueblo desde hace muchos años.

En estos cristos se recopilan lo artístico y multicultural de diferentes pueblos, ciudades y países; así mismo muestra la diversidad y detalle en trabajos de ébano, mimbre, madera, marfil, metales y piedras preciosas. El museo cuenta con piezas de América del Norte, Centroamérica, Suramérica, Asia, Europa, y con ellos los diferentes sentires y saberes que transforman sus  culturas, hay cruces y crucifijos negros, indios, agonizantes, cristianos y no cristianos.

Después de completar su colección a través de tantos años, Roberto Hoyos decidió que Marinilla, pueblo que lo vio nacer, fuera la pionera de su obra y así convertir el municipio en un lugar reconocido  en Colombia y en todo el mundo a través de su colección única, bautizada “El Museo del Cristo”, que se puede apreciar en la casaMarinilla, Antioquia de la cultura José duque Gómez. “Aunque la Iglesia Católica no presta mayor atención a la colección, ésta es valiosa para la comunidad de marinilla, este es un pueblo muy devoto y cada 3 de mayo hacemos una procesión en honor a los Cristos. Además, recibimos visitas de muchas partes del país y del mundo, sobre todo en semana santa”, comenta Jorge Iván Castaño, funcionario del la Casa Cultural.

En honor al señor Roberto Hoyos Castaños, en el año 2005 los marinillos escribieron el eslogan:

Un siglo que permanece
Museo del Cristo y las Cruces. Roberto Hoyos Castaño.
El cristo que yace clavado en el madero, abraza con renovado ímpetu la vida que florece y se transforma. En este interminable ciclo, halla su inspiración para el servicio y la entrega incondicional, Roberto Hoyos Castaño quien su tierra agradecida, aquí reconoce. Marinilla agosto 13 del 2005

Así es marinilla, pueblo creyente donde las personas hacen honor a su devoción con grandes cosas.

 

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Por Érika Peña

Comunicadora Rural, Asofrumar (Marinilla, Antioquia)