Con la participacion de más de 150 personas en representacion de numerosas organizaciones, se llevó a cabo en la ciudad de San Gil la asamblea de organizaciones sociales de las provincias del sur de Santander, cuyo propósito fue impulsar la búsqueda de caminos para incidir en la gestión del desarrollo territorial, aprovechando la coyuntura actual del país, en donde comienza a adoptarse el enfoque territorial en el Desarrollo Rural.
Las provincias del sur de Santander tienen una reconocida tradicion de lucha social y organizacion popular, que se remonta a los tiempos de la conquista y la colonia española. Aquí se originó, en el siglo 18, el movimiento comunero, y en los años 60 del siglo veinte, bajo la inspiración y liderazgo de la Iglesia Católica, se dio comienzo a un proceso de organización comunitaria que con el paso de los años se convirtió en la más importante iniciativa de desarrollo territorial en Colombia. Y fueron las organizaciones sociales quienes se encargaron de hacer realidad los destacados logros obtenidos en esta región.
"Santander, territorio solidario" ha sido el lema representativo de lo que por décadas se ha construido en las provincias velaña, Guanentina y Comunera, y entre sus frutos hay que mencionar el fuerte desarrollo de la economía solidaria, con la creación y funcionamiento de más de 50 cooperativas de ahorro y crédito, algunas de gran envergadura como es el caso de Coomuldesa y Coopcentral. La Universidad de San Gil, en donde tuvo lugar la asamblea el pasado 29 de febrero, fue creada por los movimientos sociales, y una serie de importantes indicadores de calidad de vida y desarrollo social pueden ser destacados como fruto de este proceso de construcción participativa del territorio. En esta región se viene trabajando con enfoque territorial desde mucho antes que el tema empezara a ponerse de moda por estos dias en Colombia a raíz de las propuestas de la Misión para la transformación del campo y a las discusiones llevadas a cabo por diferentes actores del mundo rural, a propósito de los diálogos en La Habana ente la guerrilla y el gobierno. En términos prácticos, las provincias del sur de Santander son las pioneras en el país en el tema del enfoque territorial para el desarrollo. Y es la razón por la que están interesados ahora en fortalecer y revitalizar el proceso de "Santander territorio solidario", aprovechando el buen clima político existente hoy en favor de este tipo de enfoques.
En la asamblea se discutió una propuesta concreta: organizar una mesa de trabajo para promover un gran programa estratégico y de largo plazo, de desarrollo rural con enfoque territorial, que tome como punto de partida la experiencia y logros obtenidos en los últimos cuarenta años, y potencie las capacidades productivas y la competitividad de la región, mediante un proceso de participación y concertación. La Agricultura Familiar será uno de los elementos de la estrategia, y también el impulso a la productividad de diferentes sectores agropecuarios organizados, como los paneleros, los cafeteros, tabacaleros, fiqueros, frijoleros y horticultores.
La propuesta es impulsada por la asociacion campesina El Común, la Pastoral Social de la Diócesis de Socorro y San Gil, la Fundación Coomuldesa, Resender, que es la red de radios comunitarias de la región, así como otros movimientos y organizaciones de productores y pobladores, y con una destacada y notiria presencia de organizaciones de mujeres rurales.
"Solo una ciudadanía activa es capaz de detener la corrupción que afecta el desarrollo territorial y solo una ciudadanía activa puede hacer las prouestas que el territorio necesita para mejorar el futuro de la población", dijo Miguel Fajardo, director del Centro de Estudios de Economía Solidaria de UniSan Gil, uno de los promotores de la iniciativa.
El obispo de la Diócesis de Socorro y San Gil, Monseñor Carlos Germán Mesa, acompañó el evento y manifestó su apoyo al proceso, el cual consideró de gran importancia para la región.
Durante la reunión se conformaron varios grupos de trabajo para discutir una propuesta de trabajo orientada a la construcción de una mesa de coordinación del proceso. Cada grupo presentó sus conclusiones, en su totalidad apoyando la propuesta y una mesa de trabajo fue constituida para coordinar las actividades y los pasos a seguir.