Poblaciones rurales a merced de la contaminación y enfermedades por el inadecuado manejo de los residuos sólidos. El ser humano, por los afanes de tener una vida más confortable y segura, ha producido grandes cantidades de materiales no deseables que en la actualidad ocasionan daños severos en la calidad del suelo, el aire y el agua repercutiendo en la salud de las personas.
Especialmente en los pobladores de los corregimientos de Caracolí, Los Venados, El Perro y Guaymaral quienes se ven expuestos a toda clase de residuos sólidos arrojados a campo abierto, de donde salen ratas, cucarachas, moscas, mosquitos y muchos micro organismos perjudiciales. En este sitio se alimentan animales domésticos como cerdos y gallinas, entre otros, los cuales son sacrificados posteriormente para el consumo en estas localidades, transmitiendo parásitos y bacterias a las personas.
Los niños más pobres son los que más frecuentan estos “botaderos” buscando juguetes viejos; exponiéndose a todo riesgo de insalubridad, con los pies descalzos semidesnudos y percibiendo todo lo que se emite de estos muladares. Todo porque, según manifestaron los habitantes de estos pueblos, nunca se les ha implementado una política de gestión de residuos sólidos para protegerlos del riesgo y la amenaza que los acecha cada día.
El reciclaje como alternativa
Para mitigar este riesgo es necesario implementar desde cada vivienda la política de reducir, reusar y reciclar, lo cual significa que se debe reflexionar en lo que usamos, cómo lo hacemos, a donde puede ir después de usarlo, y por último cómo podemos dejar de utilizarlo.
En la zona rural este reciclaje, aparte de contribuir con un medio sano, generaría ingresos económicos a las personas que practiquen esta actividad, se ayudaría a minorar la tala de árboles para producir papel, y la utilización de grandes cantidades de barriles de petróleo para la fabricación de plásticos.
Lograr que haga parte de la agenda pública municipal
Es necesario que estas comunidades del sur occidente de Valledupar dejen de ser conformistas frente a esta situación para que generen escenarios que permitan mejorar la calidad de vida y contribuir con ayudar a salvar nuestro planeta. Para esto es imperativo que los mandatarios locales incluyan esto en su agenda, lo cual se lograría de varias formas:
1. Utilizando los mecanismos de participación ciudadana como la iniciativa popular.
2. Invitar los medios de comunicación nacional para muestren la noticia con gran impacto y la coloquen en contexto.
3. Lograr que este flagelo se incluya en los planes de desarrollo municipales.
Con esto la población rural dejaría de estar amenazada por los residuos sólidos regados a campo abierto ya que contarían con un sitio de disposición final y una política de reciclaje bien establecida.
Por Aroldo Miramon. Comunicador Popular RNCU