En días pasados se realizó el taller de formulación participativa de proyectos, en el marco del Convenio Corporación PBA - Instituto Colombiano para el Desarrollo Rural (INCODER), en donde participaron los aliados estratégicos como Tolipaz , Pastoral Social de la Diócesis de Ibagué, AFP –Cindap, Fundación del Alto Magdalena y funcionarios regionales de Incoder de los departamentos de Cundinamarca, Boyacá, Caldas Tolima, Caquetá, Huila y de la Corporación PBA.
El objetivo del taller fue dar a conocer la metodología de Innovación Rural Participativa (IRP) la cual se aplica en este convenio como marco metodológico. También se capacitó a los asistentes en el método de formulación participativa de proyectos.
La metodología IRP consiste en la participación de los diferentes actores en el proceso desarrollo rural pero enfocada en las identificar y fortalecer a los líderes de una comunidad que tengan sentido de pertenencia y aporten sus ideas dando paso a un empoderamiento y apropiación de su propio desarrollo y el de sus familias, en lo social, educación, económico en los pequeños agricultores generando su propio proyecto de vida.María Victoria Álvarez, facilitadora del taller, dio a conocer y explicó la metodología IRP. Esta es una de las estrategias que la Corporación PBA ha venido trabajando durante los últimos años en los procesos de desarrollo participativo con agricultores de diferentes zonas del país.
La metodología IRP promueve la participación de los diferentes actores en el proceso de desarrollo e innovación rural, y se basa en cuatro pilares fundamentales: el método DOI (Desarrollo Organizativo para la innovación); el método EPPR (Empoderamiento de los Pequeños Productores Rurales); el métoo MTPO (Mejoramiento Tecnológico Participativo); y el método EPR (Emprendimientos Participativos Rurales). El enfoque metodológico IRP ayuda a identificar y fortalecer a los líderes de una comunidad que tengan sentido de pertenencia y aporten sus ideas dando paso a un empoderamiento y apropiación de su propio desarrollo y el de sus familias, en lo social, educación, económico en los pequeños agricultores generando su propio proyecto de vida.
Este método permite a las familias y a sus integrantes tener una participación integral participativa sostenible en el desarrollo de sus capacidades personales y liderar proceso sostenible en la comunidad.
De esta forma se da inicio al trabajo participativo integrados por profesionales, técnicos agricultores y teniendo como base la participación activa de la comunidad.
Por Martha Pinilla, Comunicadora Rural, Carmen de Carupa (Cundinamarca)