Posicionamiento en mercados internacionales y aumento de la producción de maracuyá son los logros obtenidos durante el primer informe investigativo del proyecto de certificación de semillas de pasifloras en el departamento del Huila.
Con el objetivo de mejorar la calidad productiva en el sector e incursionar en mercados de exportación, CEPASS, la Universidad Javeriana y la Corporación PBA adelantan, con organizaciones de pequeños productores, el proyecto de certificación de semillas y plántulas de pasifloras en el Huila.
Este proyecto beneficia especialmente a las asociaciones de pequeños productores, entre ellas la Asociación de Productores de Frutas de Guayabal – ASOPROFRUG, ubicada en el centro poblado de Guayabal, en el municipio de Suaza, constituida como entidad sin ánimo de lucro y dedicada a la producción de maracuyá. Sus miembros reciben acompañamiento y asesoría técnica, empresarial y socio-organizativa permitiendo, entre otras, que las acciones científicas sean llevadas al campo y puedan ser apropiadas para el proceso de certificación de semillas.
Se estableció un Núcleo de Investigación Participativa (NIP) en donde se evaluaron 7 tratamientos diferenciados, en cuanto a acondicionamientos fisiológicos a las semillas de maracuyá. El proceso de certificación de semillas en el campo científico estuvo a cargo de la Universidad Javeriana, acudiendo a los protocolos de sanidad e inocuidad con el fin de obtener un fruto consistente y equivalente, libre de plagas y enfermedades, con el fin de reducir los costos de producción y elevar los índices de cosecha.
Durante el proceso se han venido adoptando nuevas estrategias de trabajo, como la implementación de un Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades con base en un monitoreo para identificar la presencia de plagas y el nivel de daño presente. Esto, con el fin de involucrar medidas de control cultural, biológico, orgánico y, como último recurso, químico, respaldadas en la inspección continua, la prevención y el manejo. Se establecieron sistemas de registro que permiten elaborar un estudio técnico para mejorar el impacto que se puede lograr con cada uno de los tratamientos en cuanto a la amplitud de cosecha, la calidad morfológica del fruto, los grados brix, la utilidad de contenido pulposo al momento de la recolección de fruta y diferentes características que se determinan en laboratorio. De esta manera se obtienen las características esperadas para poder llegar a la certificación de la semilla, como parte del progreso y desarrollo que tiene el cultivo de maracuyá y, en general, la producción de pasifloras en la región.
La metodología empleada ha contribuido a que los productores de pasifloras apliquen conocimientos técnicos, mejorando sus condiciones de semillas, sus condiciones técnicas y los procedimientos en sus parcelas, aprobando nuevas capacidades que permitan llegar a los objetivos establecidos.
Dentro del proceso se han sumado actores importantes como la Fundación Bolívar Davivienda, quien ha aportado recursos para que, con el acompañamiento de la Corporación PBA, se construya infraestructura para la producción de bioinsumos, se establezcan Núcleos de Investigación Participativa, se mejore el manejo agronómico de los cultivos y se fortalezcan las capacidades organizativas y empresariales de los productores.
Todo este proceso ha contribuido a la innovación y el desarrollo en el sector agrícola del municipio de Suaza, impulsando nuevas iniciativas en la producción de pasifloras en el Huila, departamento pionero en esta actividad.
Por: Yuri Toledo y Miguel Hoyos
Comunicadores rurales