El último año no ha sido fácil para ninguna persona. La pandemia afectó la forma de vivir y de concebir la vida, incluso en zonas tan tranquilas como el campo, en donde nosotros habitamos. El temor al contagio hizo que, por algunos instantes, dejáramos de emprender y de luchar por la asociación en la que tanto trabajo hemos invertido.
Pero gracias al apoyo de la Corporación PBA, que a pesar de lo difícil que son los tiempos continuó caminando a nuestro lado incondicionalmente, logramos no perder el rumbo. Por el contrario, continuamos fortaleciendo nuestra organización comunitaria: la Asociación Turística Absa Chingaza del municipio de Choachí, Cundinamarca.
PBA lleva dos años acompañando nuestra organización, pero el último de ellos tuvo que hacer un gran esfuerzo para que no se perdiera el camino andando. Para que, a pesar del temor que había, se continuara sin desfallecer, ya que en estos tiempos difíciles por momentos nos dispersamos como asociación.
Gracias a esa gran labor de acompañamiento, Absa Chingaza retomó el camino para alcanzar sus metas. El trabajo en equipo dio sus primeros frutos en tiempos de pandemia y el día sábado 27 de febrero logramos tener nuestra primera feria turística del Oriente de Cundinamarca. Este fue un encuentro virtual, que tuvo una duración de dos horas y contó con la participación de diferentes actores turísticos.
Los asociados logramos vencer temores, adquirir experiencia para futuras ferias y, sobre todo, volvimos a ganar confianza en nuestro trabajo. Nos motivamos a continuar trabajando en pro de la conservación y del aprovechamiento sostenible de los recursos existentes en nuestro territorio y descubrimos que el camino se hace más corto cuando quien te apoya se convierte en tu amigo.
Por: Catalina Raigozo
Comunicadora Rural