En la búsqueda del fortalecimiento de las capacidades productivas de las comunidades que son acompañadas por la Corporación PBA, se realizan diferentes talleres de capacitación en donde los participantes se vinculan activamente aplicando la metodología de Innovación Rural Participativa (IRP), compartida por los facilitadores, para mejorar la organización, el desarrollo y la productividad de sus cultivos.
En uno de estos talleres con el Grupo Participativo Local (GPL) Almodena se presentaron las bases para la elaboración de algunos tipos de abonos orgánicos. Tras la presentación teórica, los participantes tuvieron la oportunidad de poner en práctica el conocimiento adquirido, elaborando dos bioles, un compost y un alimento para microorganismos con materiales y desechos comunes de la región. Algunas de las materias orgánicas que se utilizaron fueron hojas secas, eses bovinas y suero dulce.
A raíz de esta experiencia, y del hecho de que algunos productores del grupo han aplicado bioles en sus cultivos y han obtenido excelentes resultados, dos de los participantes, Iván Soto y Janer Suárez, tuvieron la idea de elaborar a gran escala este tipo de abonos orgánicos para la comercialización, no solo dentro del grupo, ni solo para los cultivos de yuca industrial, sino también para presentarle estos productos a todos los productores agrícolas de la región, como alternativa al uso de fertilizantes químicos.
Janer Suárez manifiesta que para él “hacer este tipo de abonos en el grupo y después vendérselos a quienes vayan a fertilizar sería de gran ayuda porque es un ingreso adicional”. Hay otros participantes que comparten esa idea, con la que además se reducirían costos en los cultivos propios y en los Núcleos de Investigación Participativa (NIPs) que realice el GPL, ya que no tendrían que comprar fertilizantes a terceros.
Por otro lado, la elaboración de estos abonos es una oportunidad de transformar y darle otra visión a los proyectos productivos, mostrando un avance hacia los cultivos y siembras limpias puesto que se reemplazan los productos químicos por otros totalmente orgánicos, que son beneficiosos para la sostenibilidad del suelo.
Iván Soto, otro de los integrantes de esta iniciativa de emprendimiento, comenta que “cambiar los fertilizantes químicos, que son comunes en la región, por estos que son totalmente orgánicos, ayudaría mucho a reducir la contaminación del suelo y de los canales de agua que pasan por la zona”. Varios productores pertenecientes al grupo concuerdan con esta afirmación.
La idea de poner en marcha esta iniciativa significará para el grupo, además de tener responsabilidades adicionales con la organización, un aprendizaje adicional con el que podrían generar mayor reconocimiento de sus productos y de las actividades que realizan como grupo.
Por: comunicadores rurales del GPL Almodena