Dentro de la alianza que tiene la Corporación PBA con la Fundación Bolívar Davivienda, en la que se han venido desarrollando varios proyectos, surgió un nuevo componente para que los voluntarios de las empresas del Grupo Bolívar Davivienda asesoren, acompañen y fortalezcan algunas organizaciones con las que la Corporación ha venido trabajando. El proyecto pionero se está llevando a cabo en el oriente de Cundinamarca y en la zona Costanera de Córdoba y Sucre.
En un primer momento se capacitó, presencial y virtualmente, a los distintos voluntarios en la estrategia de Innovación Rural Participativa (IRP) con el fin de que conocieran y fortalecieran sus conceptos tanto en IRP como en facilitación, antes de que tuvieran contacto directo con las organizaciones. Posteriormente, el viernes 17 y sábado 18 de mayo, se realizó la primera jornada de trabajo conjunta entre los voluntarios y los productores del oriente de Cundinamarca.
Katherine Valencia, una de las voluntarias, nos contó sus expectativas del taller: “Yo quiero aprender mucho, quiero escucharlos, quiero poderlos guiar y acompañar en este proceso, porque no es solamente el impacto inmediato sino que también es un tema de crecimiento personal y de desarrollo. La idea es orientarlos un poquito para que ellos vean que sí se puede, empoderarlos, ayudarlos en el tema de liderazgo. Pienso que es muy gratificante el apoyo que les podamos dar como voluntarios”.
En la jornada se dio inicio al acompañamiento y asesoramiento propuesto, a través de la construcción conjunta del plan de trabajo por componentes, en donde las cuatro organizaciones, dos de bioinsumos y dos de turismo rural, se reunieron en mesas de trabajo con los voluntarios para acordar qué van a realizar, cuándo y cómo.
¿Qué esperaban los productores de este encuentro? “Que lleguemos a algunos acuerdos que realmente permitan fortalecernos como organizaciones y como empresas, que es lo que nosotros necesitamos, y que los voluntarios puedan conocernos y experimentar otro tipo de cosas que no sean la cotidianidad de la ciudad ni lo que hacen normalmente”, aseguró Santiago Raigozo, representante legal de la asociación de turismo Absa Chingaza.
Durante el taller, Sebastián Pardo, miembro de la organización de bioinusmos ASOCOTEC, nos contó las sensaciones que tenían hasta el momento “es un proceso innovador y bastante interesante, que nunca habíamos hecho. Hemos aprendido bastante y nos ha permitido ver en dónde estamos con la organización, a dónde queremos llegar y fijarnos unas metas claras para lograr el objetivo que queremos”.
La jornada, que se llevó a cabo en Choachí, fue positiva y satisfactoria tanto para los productores como para los voluntarios. Erika Trespalacios, directora de Ciudadanía Corporativa de la Fundación Bolívar Davivienda, declaró: “esto es innovación. Es increíble ver que cuando las personas se unen logran cambiar la realidad y cuando eso pasa llega más apoyo, más oportunidades y más recursos. Se vuelve un ciclo de prosperidad, de crecimiento, de mejores ingresos para más familias, de mejores oportunidades para las empresas y para las organizaciones, para repensarse y hacer acciones que generen cada vez más valor”.
Este proceso continuó con la primera jornada de trabajo en San Antero, Córdoba, los días 24 y 25 de mayo, en donde se reunieron otros voluntarios con las organizaciones de turismo comunitario del Sistema Territorial de Innovación de la zona Costanera de Córdoba y Sucre, en donde definieron conjuntamente el plan de trabajo y de acompañamiento que se va a llevar a cabo.