La Corporación PBA realizó el taller lecciones aprendidas, como cierre del proceso de formación de capacidades en innovación rural, en población desplazada por el conflicto en la región Caribe colombiana. Esta actividad, enmarcada dentro del convenio con la Comisión de Seguimiento a la Política Pública sobre el Desplazamiento Forzado y CODHES, fue el espacio para compartir los conocimientos, experiencias, aprendizajes de las comunidades participantes, provenientes de los departamentos de Guajira, Cesar y Magdalena. Hoy por hoy, muchos dicen que el haber tenido esta oportunidad de conocer las metodologías de la corporación PBA les trajo recuperación de la confianza, capacidad de trabajo en equipo, empoderamiento y ganas de llevar a cabo emprendimientos.
Este proyecto se ejecutó durante un periodo de seis meses, con el objetivo de desarrollar procesos de innovación y desarrollo rural a través de una prueba piloto en comunidades en proceso de retorno. Entre las actividades realizadas estuvo una gira de aprendizaje, que motivó a varios grupos de desplazados a sumarse al proceso. Los núcleos piloto que hicieron parte de estos procesos fueron: en el departamento de La Guajira: Dibulla, Alto San Jorge, Riohacha y los Totumitos; en el departamento de Magdalena, Nueva Granada y Ariguaní; y en el departamento de Cesar, Pailitas.
Los multiplicadores realizaron la capacitación con base en los cuatro componentes de la metodología de Innovación Rural Participativa, que promueve la Corporación PBA. Con ellos se logró la recuperación de la confianza en sus familiares, la comunidad y el entorno del que un día fueron despojados y expulsados por grupos violentos.
Durante el proceso se compartieron muchas experiencias exitosas, como la de Wendy Sandri Santana, niña de de 10 años, procedente de Pailitas e hija de padres campesinos, quien se vinculó al proceso de capacitación con la corporación PBA, siendo esta la primera vez que un menor toma parte de estos procesos.
Las vivencias durante el convenio e integración entre comunidades, permitieron conocer las problemáticas de los demás, buscar estrategias que conlleven al mejoramiento de la calidad de vida en las comunidades desplazadas, obtener conocimientos para la creación de organizaciones, para el mejoramiento tecnológico productivo, así como formas de estimular la participación y el liderazgo.
Por: Milanyela Cotes Redondo. Comunicadora Rural, Dibulla.